El verano es una época en la que nos vamos de vacaciones y aprovechamos para relajarnos y desconectar, por lo que nuestra rutina y hábitos se ven modificados, incluso a la hora de comer.
Debemos adaptar la alimentación a la época estival, buscando los alimentos con alto contenido en vitaminas, nutrientes y antioxidantes a la par que nos hidraten y nos aporten una sensación de saciedad.
¿Cómo son los alimentos saciantes?
Los alimentos saciantes son de origen natural, tienen un alto contenido en fibra. Suelen contener bastantes proteínas o carbohidratos complejos, que se asimilan más lentamente por nuestro organismo. Además, tienen un índice glucémico bajo y son ricos en agua.
¿Cuáles son los alimentos más saciantes para verano?
Los alimentos saciantes nos ayudan a controlar el apetito y evitar picotear entre horas. A continuación, te dejamos una lista resumen de los alimentos que sacian el apetito y que puedes incorporar en tus comidas. Desde aguacate o frutas acuosas para un desayuno hasta pescado azul como son las sardinas para una comida o cena.
1. Sardinas
El pescado azul además de saciar el apetito aporta una gran cantidad de nutrientes como la taurina, el omega 3, el calcio y la vitamina D. Puedes consumirlo de diferentes maneras: a la plancha, a la parrilla, cocido, al horno… Si se fríe pierde sus propiedades y no es la opción más saludable.
2. Aguacate
El color verde, su sabor y sus diferentes formas de consumirlo no son lo único que hacen atractivo al aguacate. A pesar de su alto contenido calórico, el aguacate resulta un gran saciante y nos aporta grasas de calidad, además de vitamina E, antioxidantes y multitud de micronutrientes como el ácido fólico, el hierro, el fósforo, el magnesio y el potasio.
Tomar medio aguacate a media mañana puede reducir el apetito hasta un 40%, horas después de almorzar, debido a su alto contenido en fibra alimentaria.
3. Patatas cocidas
La patata es un carbohidrato poco calórico ya que 100 gramos son 80 calorías. Asada o cocida, nos sacia de manera saludable y nos aporta una gran cantidad de energía sin apenas grasa.
La patata cocida, con un chorrito de aceite y una pizca de sal y pimentón se convierte en un aperitivo ideal y muy saludable que podemos incorporar a nuestro menú en verano.
4. Yogur griego
Este producto lácteo es rico en proteínas y con un alto valor biológico, ya que es una gran fuente de probióticos naturales. Se puede consumir a cualquier hora del día, como desayuno, postre o merienda. Además, se le puede añadir frutas, avena o frutos secos a la hora de consumirlo para aumentar la sensación de saciedad.
5. Frutas acuosas
Las frutas acuosas más refrescantes y consumidas en el verano son por excelencia, la sandía y el melón. A la hora de la merienda o como postre, estas frutas nos aportan una sensación de saciedad a la vez que nos hidratan.
La sandía alcanza un 94,6% en agua, y además de saciar es rica en vitamina A, sodio, potasio, magnesio y licopeno, antioxidante que ayuda a protegernos de las radiaciones solares.
El melón se constituye de un 90% de agua, y posee importantes propiedades nutricionales pues contiene gran cantidad de potasio, calcio, fósforo, magnesio, hierro y sodio además de contener altos niveles de vitaminas A, B C y K.
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